domingo, 17 de octubre de 2010

Primera parte

Un día me detuve a mirar hacia atrás y me pude dar cuenta de todo lo que he pasado, ha sido muchos los años que han pasado por mi vida aprendiendo un sin fin de cosas, por ejemplo, de joven aprendí a conducir, también aprendí muchas cosas de índole académica que no vienen al caso, pero las aprendí, también aprendí como tocar la batería y esto es lo que más hago actualmente, aprendí el valor real de las cosas, no en el aspecto material si no el que va mas allá, aprendía a reconocer lo que me hace feliz y lo que no (que es diferente de lo bueno y lo malo),a ser realmente un buen amigo y en este ámbito no es que haya sido muy afortunado, porque la verdad es que he sido más amigo yo que los que se han dicho amigos míos.

El paso de los años no solo me ha dado enseñanzas, experiencias y todas esas cosas, me ha dado una familia increíble, una mujer que amo profundamente y que ha sabido ser mi compañera ideal, unos hijos maravillosos, el varón no es mi hijo biológico pero al verdad lo siento como si lo fuera, además, para ser padre solo hay que sentirlo, con el he aprendido a calibrar mis conocimientos, conocí nuevos personajes de dibujos animados raros pero al final eran divertidos, recuerdo las tarde que pasaba por el al colegio y las conversaciones que teníamos respecto a su día  y las peleas que tenia con su mejor amigo, las charlas sobre los valores de un hombre, que lo importante no es lo que se tiene ni lo que puedas conseguir en la vida, sino de saber disfrutar de todo eso  y ser humilde.
Recuerdo las noches que se levantaba e iba a la habitación a decirme que había tenido una pesadilla, y yo se que solo quería el calor de la cama y sentirse protegido, su primer día de instituto fue genial, y no veas cuando se hecho novia, estaba super nervioso lo entiendo es normal estarlo, porque a pesar de tener mis años, yo sigo poniéndome nervioso con su madre, dios gracias por esta mujer tan maravillosa que acompaña todos mis días.

La verdad que llegar a este punto de mi vida ha tenido sus alto y bajos, tuve una época muy dura, que me veía sin esperanzas sin un norte claro, y casualmente en esa época yo era un promotor asiduo de que las cosas siempre mejoran y pues ahora lo puedo decir con una fe ciega, todos los sueños se pueden hacer realidad.

En esa etapa estaba en la búsqueda de mis sueños, y  no es que ahora no lo hago, al contrario, en cada día que paso en este mundo sueño cada vez más.

Siempre soñé con tener una familia ideal, tal y como la tengo ahora, y  uno de mis  sueño fue el nacimiento de mi hija, la bebe más hermosa que he visto jamás con unos ojos espectaculares y una sonrisa cautivadora, hoy es mi compañera de ir al super, se la pasa genial metida en el carro de la compra y lo mejor aun, me ayuda a elegir el mejor producto, se  me ilumina la cara cada vez que vengo de la oficina y le veo junto a su madre en el salón de la casa mirando la tele, que lastima que crezcan tan rápido. Para mí fue ayer cuando nació, todo el alboroto que se armo con eso, mi madre se vino en un vuelo casi expres, la pobre voló muchas horas para estar en el nacimiento de su nieta, menos mal que en esos día mi camioneta no estaba en casa como de costumbre, como suelo ir a la oficina en moto, esos día siempre anduve en el coche por si las fly´s, uno nunca sabe cundo tenga que salir disparado,y mira que lo tuve que hacer, de paso coincido el nacimiento de la niña  con el llegada de mi madre, salí literalmente volando al aeropuerto a recoger a mi madre, menos mal que mi suegra estaba en la clínica con mi bella, al llegar a la clínica me puse una bata verde y corrí al paritorio, cámara en mano y el corazón en la garganta, fuera estaba todo el mundo esperando conocerle, dentro cada segundo era eterno miraba a mi  bella , al doctor a las enfermeras y solo pensaba, dios aquí está naciendo mi hija.

Luego de no sé qué tiempo al fin vio luz en el mundo, una niña hermosa y muy sana, mi bella y yo nos besamos y le dije que me ha había convertido en un hombre completo que hoy podía decir que no me hacía falta de nada, tengo una empresa con unas ganancias impresionaste, una casa tal cual ella y yo lo soñamos, un hijo espectacular que le quiero mucho, una madre fuera de serie, una suegra que nos sé como agradecerle todo lo que hiso por mí, mis cuñados y mi sobrino y ahora una bebe hermosa, lástima que mi abuela no está con nosotros.

La vida me ha permitido conseguir todo eso, ser un hombre capaz de hacer del polvo un castillo y de una gota de agua un rio, de saber que cada instante es mágico, que no existe un no puedo que no hay nada más grande , al menos para mí, que el valor de la familia, ver crecer a mis hijos, ser el compañero ideal para mi bella, el hijo que mi madre soñó alguna vez , el empresario que siempre quise ser, y más aun, el hombre que quiero seguir siendo.

Continuara…